Anatomía de un retiro de alimentos: de inicio a fin
Parece que cada vez escuchamos más frecuentemente acerca de los retiros de alimentos. Para entender lo que está sucediendo, echemos un vistazo a los retiros de alimentos en términos de agencias gubernamentales responsables, causas, clasificaciones y regulaciones.
Agencias gubernamentales
La Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) regula aproximadamente el 80% del suministro de alimentos, que incluye alimentos nacionales e importados y alimentos para mascotas. El otro 20% específicamente productos de carne, aves y algunos productos de huevo, está regulado por el Servicio de Seguridad e Inspección de Alimentos (FSIS), que pertenece al Departamento de Agricultura de los Estados Unidos.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades se involucran cuando un departamento de salud estatal les reporta la aparición de una enfermedad transmitida por los alimentos. El CDC a su vez notifica a la FDA o al FSIS y comienza una investigación para determinar cuál es el producto alimenticio involucrado. Además, los fabricantes y/o los distribuidores se pondrán en contacto con la FDA o el FSIS directamente si identifican un problema de inocuidad de los alimentos en su operación o reciben quejas de los clientes sobre un producto contaminado.
Causas y clasificaciones del retiro de alimentos
Normalmente, se llevará a cabo un retiro de alimentos debido a la contaminación por patógenos, contaminación física o etiquetado incorrecto del producto alimenticio.
• Los patógenos son microorganismos causantes de enfermedades. Los más familiares en términos de retiros de alimentos son Salmonella, E. Coli y Listeria. La contaminación puede ocurrir en cualquier punto de la cadena de suministro de los alimentos desde la producción en campo hasta el servicio (venta minorista).
• Los contaminantes físicos son elementos que no pertenecen a un alimento como una pieza de plástico, vidrio o pedazos de metal. De nuevo, esta contaminación puede ocurrir en cualquier punto de la cadena de suministro de alimentos, pero lo más probable es que ocurra durante el procesamiento del alimento.
• Cuando se coloca una etiqueta incorrecta en un alimento o cuando alérgenos como la leche, nueces o aditivos/colorantes de alimentos no están incluidos en una etiqueta, significa que el artículo está mal etiquetado y debe ser retirado.
Los retiros de alimentos se clasifican en las siguientes categorías:
• Los retiros de clase I son los más graves y se considera que pueden causar graves efectos adversos para la salud o la muerte. Esto incluye la contaminación con un patógeno y alérgenos no declarados (alimentos que contienen uno o más alérgenos principales pero que no están etiquetados como tales).
• Los retiros de clase II indican que el consumo de los alimentos podría causar un peligro temporal para la salud, o la probabilidad de problemas de salud adversos graves es remota. Esto puede ser Norovirus en mariscos o potencial botulínico.
• Los retiros de clase III pueden ser artículos que tienen un peso incorrecto, etiquetados como orgánicos cuando no lo son o un alimento que contiene levadura o moho. En estas situaciones, es poco probable que comer los alimentos cause un problema de salud, sino únicamente estaría infringiendo las regulaciones.
¿Aumento de los retiros de alimentos?
En abril de 2018, el Servicio de Investigación Económica (ERS) del USDA publicó su informe Tendencias en el retiro de alimentos 2004-2013, que indicaba un aumento significativo en el retiro de alimentos durante este período. ERS atribuyó esto en parte al volumen cada vez mayor de alimentos que se venden en los Estados Unidos. Sin embargo, lo que es más importante son los cambios normativos y los avances en la tecnología en torno a la detección e identificación de patógenos que mejoran aún más nuestra capacidad para controlar y monitorear la seguridad de los alimentos.
Leyes en materia de Inocuidad Alimentaria
En 2011, se promulgó la Ley de Modernización de la Seguridad Alimentaria (FSMA) y en los últimos 8 años se han implementado diversos aspectos de esta legislación. El objetivo de FSMA es fortalecer nuestro sistema de inocuidad de los alimentos mediante la prevención de problemas en todo el sistema alimentario, evitando así las enfermedades transmitidas por los alimentos. Con este fin, se ha requerido que las instalaciones de alimentos implementen controles preventivos que analicen los riesgos potenciales dentro de sus instalaciones e identifiquen e implementen métodos para controlar y eliminar estos riesgos. En algunos casos, esto significa más pruebas de los alimentos y el medio ambiente para detectar patógenos o trabajar con los proveedores para garantizar la inocuidad de los alimentos antes de llevarlos a la planta de procesamiento.
En el campo y/o en la agrícola, se ha puesto mayor énfasis en las buenas prácticas agrícolas y en la seguridad de la producción de los alimentos al tipificar los posibles riesgos de contaminación y los métodos de su prevención. Esto puede incluir realizar pruebas en las fuentes de agua, capacitar a los trabajadores en prácticas de higiene para la cosecha y almacenamiento de productos frescos y desarrollar planes de seguridad alimentaria para los proveedores de tercera parte con los que colabore la empresa.
Estas regulaciones afectan todos los aspectos de la cadena de suministro de alimentos desde la cosecha, el transporte, el almacenamiento, el procesamiento, la compra y, finalmente, hasta el consumidor. Obviamente, el sistema no es perfecto y el error humano aún juega un papel importante, si se coloca una etiqueta incorrecta en un artículo o si una superficie no se limpia y desinfecta adecuadamente. Sin embargo, la esperanza radica en que los controles preventivos existentes identifiquen los problemas antes de que los alimentos estén a la venta para el público en general.
Tecnología
La tecnología de secuenciación del genoma completo (WGS, por sus siglas en inglés) permite que los patógenos se identifiquen de manera más precisa y resulta en una identificación más rápida del alimento sospechoso y la instalación de dónde provino, lo que permite una mayor precisión y velocidad al identificar un alimento implicado en un retiro.
Casi todos los retiros son realizados voluntariamente por el comercializador mediante notificación a los proveedores a través de la cadena de suministro. Las redes sociales han influido mucho en la velocidad con la que se comparte la información, así como en el número de personas que reciben información. Ahora miles de personas más escuchan sobre un retiro de alimentos, incluso si no les afecta directamente.
Dados estos factores, es difícil decir si realmente hay más retiros o si los procesos y la tecnología ahora disponibles están descubriendo problemas que pueden no haber sido detectados en el pasado. Como consumidores que se encuentran en el último eslabón del sistema alimentario, tienen en cuenta lo retiros de alimentos que pueden afectarles o a su familia y de esta manera sigan los procedimientos recomendados que se detallan en el aviso de retiro. Usted puede recibir actualizaciones sobre los últimos retiros de alimentos al registrarse en Foodsafety.gov. Como siempre, en su hogar, hay que seguir los consejos clave de inocuidad alimentaria: Limpiar, Separar, Cocinar y Enfriar para mantener los alimentos seguros.
Fuente: https://www.foodsafetynews.com