Entrevista: Alma Gpe. Gaxiola Noriega Directora de la Escuela Primaria General Ángel Flores

 

Originaria de La Palma, Villa Ángel Flores; egresada de la Licenciatura en Educación Primaria y con maestría y doctorado en Desarrollo Humano orientado a Pedagogía, Alma Gaxiola Noriega cuenta ya con 21 años de servicio en el sector educativo y 13 años a la cabeza del equipo de la Escuela Primaria General Ángel Flores en la comunidad de Lo de Sauceda, la cual fue piloto en la integración de niños migrantes.

  1. ¿Podría platicarnos un poco sobre el proceso que vivió la escuela para convertirse en una primaria inclusiva?

En un principio la primaria era multigrado – bidocente, es decir, yo estaba a cargo de dirección y de tres grados y otro profesor apoyaba con el resto de los salones; y funcionaba de esta manera debido a que la cantidad de alumnado que teníamos era muy poca.

En ese entonces, a un costado de la escuela se encontraban unas instalaciones en donde, con apoyo del Consejo Nacional del Fomento Educativo (CONAFE), se daban clases a niños migrantes.  Para mí, el incorporar a estos niños representaba una oportunidad de incrementar la matrícula, lo cual traería grandes beneficios generales, y se le presentó el proyecto a la Lic. Dora Ochoa, Gerente de Recursos Humanos de Agrícola Belher.

Fue en el ciclo escolar 2001-2002 cuando empezamos a integrar a niños migrantes a la primaria.

Primero que nada se trabajó en la alfabetización de los niños que no sabían leer ni escribir, conformando un nuevo salón de 1er año y se incorporó a un nuevo profesor.

Al ir incrementando el número de alumnado, de ser una escuela con dos maestros, pasamos a contar con un maestro para 1er año, un maestro para 2do año, un maestro para 3er y 4to año y un maestro para 5to y 6to, y yo en la dirección.

Era tanta la demanda que antes de que se terminará el ciclo escolar los padres de familia, que regresaban a Guerrero y Veracruz, ya tenían el cupo apartado e incluso dejando los documentos solicitados.

Fue así como logramos conformar los seis salones, con un profesor para cada uno de ellos y poco a poco hemos incorporado personal hasta llegar a ser el equipo que somos el día de hoy.

2. ¿Cuál fue la principal motivación para iniciar con este proyecto?

Siempre me cuestione el por qué cuando contamos con una escuela general de Gobierno del Estado, los niños migrantes tienen que asistir a escuelas por separado. ¿Por qué crear una escuela para ellos si hay una escuela para todos?.

Por otra parte, no solo los íbamos a beneficiarlos a ellos, al final de cuentas los niños de la comunidad iban a tener una mejor atención al tener un maestro para cada uno de los grados.

3. ¿Cuáles fueron los principales retos a los que se enfrento durante este proceso?

Principalmente el cambio de hábitos, la integración y combatir el rezago educativo.

Al principio era una negación por parte de los niños, tanto de la comunidad como migrantes. Para poder integrarlos nombramos a un niño de la comunidad “tutor” de un niño migrante, armamos equipos y trataos de mantenerlos variados e incluso hacemos lo mismo con los padres de familia.

Esta y otras actividades de integración se repiten año con año.

4. ¿Cómo ha evolucionado la aceptación de este proyecto por parte de los padres de familias migrantes?

En un principio, debido a su cultura, estaban un poco cerrados a esta idea. Una vez que ellos empezaron a notar los cambios de hábito, sobre todo de apariencia de los niños que se integraban a la escuela, fueron un poco más receptivos ante esta idea.

Al principio lo veían como una guardería y no había un compromiso de su parte pero poco a poco, mediante un proceso de concientización, les explicamos que de cierta manera la pueden ofrecer a sus hijos una mejor vida y que lo primordial es la educación.

Fue difícil porque son familias que vienen por temporadas y que ni siquiera querían entregarnos documentación oficial, fue por esto que solicitamos entregar documentación a estos niños antes de cierre del ciclo escolar.

Hoy en día tenemos un programa durante todo el ciclo escolar mediante el cual involucramos de manera más activa a los papás y hemos logrado que se den cuenta de que no solo es una guardería, sino una escuela y que así como nos exigen resultados a nosotros, como escuela debemos recibir el mismo compromiso por parte de ellos.

5. ¿Y por parte de los niños?

Quiero que sepas que nosotros no aceptamos  a más niños porque nuestra infraestructura ya no nos lo permite, pero la demanda es muy alta.

Gracias a los resultados obtenidos, los papás prefieren que asistan a esta escuela. Y esto, como te comenté, es un trabajo de año con año. Se vuelven a programar prácticas de concientización, se nombra a los tutores, se refuerzan valores, hábitos, etc.

6 De alguna manera esta escuela fue piloto y ahora muchas otras han integrado a niños migrantes, ¿qué opina al respecto?

Ese es el objetivo primordial, eliminar la escuelas para migrantes. Opino que si los niños se integran a las escuelas regulares van a ser mejor atendidos y, en dado caso que cambien de localidad o de campo agrícola, van a llegar con mejores bases.

Para mí esto este proyecto es un logro personal, y nunca tuve como objetivo obtener un papel que me acreditara como pionera sino la verdadera integración de los niños a la comunidad y erradicar la discriminación que se promovía.

7. ¿Cómo considera que debe ser el modelo de atención para los niños migrantes a nivel nacional?

Debe ser realmente inclusivo, eliminando el sinfín de programas burocráticos. La educación debe de ser general y los niños deben de tener la libertad de asistir a las escuelas que más se adecuen a sus necesidades y que les ofrezcan mejores oportunidades de crecimiento y formación.

Por una parte las reformas afirman que se pretende formar a los niños para que tengan las herramientas necesitarías para integrarse a la sociedad y en la práctica se hace todo lo contrario; los programas que atienden de manera separada a los niños no les permite que se desenvuelvan en el medio en que se relacionan.

8. ¿Algo más que desee agregar?

Agradezco que tomen en cuenta nuestro trabajo. Sabemos que cometemos errores pero estamos aprendiendo. Yo siempre le digo a mis maestros: “si esta escuela destaca no destaco yo, destacamos todos.”